¿Oiga, ústed está buscando una vaca?

Al otro lado de la carretera, el pasto estaba escaso y seco, como suele suceder en Agosto.
Ella ni corta ni perezosa, miró y remiró el horizonte, en el lado contrario había "muuuuuucho" verde.
Con lo puesto, se fue de vacaciones al campo de golf de islantilla, en el hoyo ocho, estaba el paraíso encontrado, agua en abundancia y la hierba más fresca.
Ajena a la tan traída y llevada crisis, tenia ante sus ojos, el manjar más exquisito, para aliviar las calores del verano.
Se baño en los aspersores, paseó por el green, se deleitó con un césped jugoso.
Pero los sueños, si existen para las vacas, también deben durar poco.
En busca y captura por la guardia civil y por su dueño, que ya la echaba de menos, volvió de nuevo a la rutina.
Como a todos, se le acabaron las vacaciones, de nuevo a comer "pasto seco" y a producir, ella leche, ¿nosotros? nosotros lo que podamos.